Revista Hamartia | Entrevista
Edgardo Form es diputado porteño por el Partido Solidario (PSol), integrante del Nuevo Encuentro que lideran Carlos Heller y Sabbatella y es parte del interbloque kirchnerista de 17 legisladores. Lleva cuatro décadas de experiencia como dirigente del sector de la economía solidaria y es el actual gerente general del Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos. Lanzado de lleno a la campaña por renovar su mandato, conversó con Hamartia sobre los principales temas de la agenda porteña.
¿Qué balance hace el Partido Solidario del último mandato de Macri en la CABA?
Para hacer un balance hay que tomar como punto de partida las promesas electorales de Macri al inicio de su primer y segundo mandato, donde dijo, por ejemplo, que iba a construir 10Km de subterráneo por año y la verdad es que apenas fueron unos centenares de metros y éste es un tema que forma parte de las asignaturas pendientes de la gestión de Mauricio Macri. También el tema de la urbanización de las villas miseria en la Ciudad, donde viven más de 200 mil personas y por supuesto la falta de política para la vivienda, ya sea de construcción de viviendas sociales o de viviendas que permitan el acceso a la familia joven, como créditos hipotecarios del Banco Ciudad, que dicho sea de paso tiene en su carta orgánica el objetivo de atender financieramente a pequeñas, medianas y micro empresas y sobre todo facilitar el crédito para la vivienda a sectores que de otro modo no pueden acceder al techo propio a pesar de que la constitución porteña, que es muy moderna, habla en el primer artículo de democracia participativa y puntualmente en el artículo 31 habla del derecho a la vivienda digna y al hábitat adecuado. Sin embargo, el déficit habitacional sigue siendo un gran problema que a lo largo de su gestión Macri no resolvió.
El macrismo tiene una gestión de gobierno que se ha caracterizado por enfatizar aquellas obras más visibles, más estentóreas que en parte resuelven algunos problemas, no caben dudas por ejemplo que el Metrobus de la Avenida Juan B. Justo ha sido un alivio para los que viven en Liniers o cerca de la periferia de la ciudad y tienen que trasladarse al centro de la ciudad, a Villa Crespo o al otro extremo del recorrido. Se han incorporado nuevos trenes subterráneos , pero recordemos que muchos de ellos, sobre todo los que circulan por la línea A, fueron comprados oportunamente por el gobierno nacional y estuvieron durante muchísimo tiempo en el puerto de Buenos Aires, nosotros mismos le preguntamos al ingeniero Piccardo, el titular de la red de subterráneos de CABA, por qué la demora y hubo argumentos tales como que había que adecuar el voltaje del suministro eléctrico, pero lo cierto es que hubo demora y recién el año pasado empezaron a circular los nuevos vagones, ahora se están incorporando paulatinamente algunos con aire acondicionado en la línea B. Pero con casi 3 millones de habitantes que viven en la CABA y los millones que circulan provenientes del conurbano, el tema del transporte sigue siendo un tema insuficientemente resuelto.
El Pro también propendió a un incremento notable de la presión tributaria, el rubro ABL gravita mucho. Nosotros hemos insistido en la necesidad de que haya un relevamiento casa por casa para saber, además del lugar en que están edificadas las viviendas, quién vive adentro y cuál es su poder adquisitivo para adecuar estas tasas de tributación a la capacidad adquisitiva de los habitantes. Esto no ha sido contemplado en estos términos y este año el aumento ha sido del 30%, eso pesa mucho en el bolsillo de una cantidad innumerable de familias. Ingresos Brutos es un impuesto regresivo que también gravita sobre muchísimas personas, todos en definitiva pagamos Ingresos Brutos en el momento que hacemos compras de cualquier bien o servicio y en materia de distribución de la renta, hay que reconocer que los gremios han participado en las paritarias y han obtenido resultados en el marco de las paritarias que se realizan nacionalmente y este es un dato muy importante porque es un derecho de los trabajadores a través de estas reuniones trilaterales con la presencia del Ministerio de Trabajo de Nación o Ciudad para obtener las mejores condiciones como para que el poder adquisitivo se sostenga en el tiempo.
También persiste la diferencia abismal entre el Norte y el Sur de la ciudad. De Rivadavia hacia el Sur uno puede hacer el recorrido tomando por ejemplo la Avenida Patricios, Entre Ríos, Callao desde Barracas hasta la Recoleta y simplemente caminando, mirando la construcción, las vidrieras de los negocios, la indumentaria de la gente, advierte que hay dos ciudades que coexisten en el mismo territorio. Esas diferencias persisten, si bien se han tomado algunas medidas como el Polo Tecnológico en Parque de los Patricios, todavía la brecha es notable.
La política de Macri no ha tenido logros en el campo de la infraestructura hospitalaria ni la infraestructura de las escuelas públicas. Ha habido una subejecución presupuestaria o recorte o disminución de un año para el otro en el presupuesto asignado a salud, educación y vivienda. Esto denota una ideología que tiene que ver con los sectores que finalmente son los principales votantes y destinatarios de la política de Macri, que integra una derecha remozada y con un discurso edulcorado pero donde lo esencial es la continuidad de un modelo que privilegia el mercado y subordina el Estado. Nosotros siempre decimos que sin Estado no hay derechos, y cuando hay Estado mínimo y mercado absoluto lo que se privilegian son los intereses de los grandes grupos.
El año pasado hubo gran escándalo por el fracaso del sistema de inscripción online en las escuelas porteñas. ¿Hay un accionar del Pro para favorecer a la educación privada en detrimento de la escuela pública?
Nosotros pensamos que hay una política deliberada, hay un incremento de los subsidios que otorga el Gobierno de la Ciudad a las escuelas privadas y confesionales y basta recorrer muchos de los edificios de la escuela pública para advertir que las carencias persisten. Se han resuelto algunos problemas acuciantes de calefacción, techos que se han venido abajo o implicaban riesgo -para alumnos y cuerpo docente y no docente- de que se derrumben, pero en un recorrido uno puede apreciar que en esto también hubo una falta de dedicación de políticas públicas que ayuden a resolver un derecho humano como es el acceso a la educación de calidad en todos los ámbitos de la CABA. Hemos constatado que en escuelas públicas del Sur de la ciudad hay superpoblación, porque hay que construir más edificios, mejorar las instalaciones, incorporar material didáctico.
En la presentación que hizo el ministro Bullrich a fines de 2013 con motivo del debate presupuestario, le dije al ministro que me preocupaba una concepción que estaba reflejada en el portal del Ministerio de Educación de la Ciudad, que después fue eliminada porque dio lugar a muchas críticas, que decía “si estudiás y completás los estudios terciarios vas a poder viajar más de 60 veces a Mar del Plata o comprar un departamento de 60 metros cuadrados”. Yo le dije al ministro que esto denotaba una ideología consumista, porque hubiera sido deseable que la publicidad dijera “si estudiás vas a ser un mejor ciudadano, vas a incorporar valores éticos y morales, vas a poder contribuir mejor a la sociedad que financia con su esfuerzo y sus aportes la educación pública”. El ministro me dijo que a lo largo de su gestión la ideología había quedado suficientemente clara y yo le contesté con una expresión del evangelio que dice “por los frutos lo reconoceréis”. No le gustó, pero al año siguiente, con el déficit de vacantes que se produjo, quedaron como 7 mil chicos afuera, hubo un debate en el recinto y yo recordé aquello, ahí estaban los frutos, porque la vida confirmó ese desinterés por un tema de enorme importancia, porque si hablamos del mejoramiento de las condiciones de vida, la educación es un factor clave.
Sin embargo, la CABA sigue siendo un territorio difícil de disputar para el kirchnerismo, una porción muy grande de la ciudad sigue respaldando al Pro…
Se puede prever, dadas las encuestas, que puede haber una reiteración del Pro al frente de la Ciudad. Nosotros en todo momento partimos de la base de que gobernar es resolver los problemas de la gente y crear trabajo, que es la forma de dignificar la actividad de las personas. Y en esto hay carencias, evidentemente del gobierno de Macri. Ahora, es indudable que han logrado captar el interés y la voluntad que se manifiesta en las elecciones de un porcentaje todavía significativo de la sociedad porteña. Las causas de esta seducción seguramente son múltiples, muchos lo votan sobre todo aquí donde se concentra el privilegio tradicional de la sociedad argentina, la Capital Federal, por razones ideológicas, por coincidir con la derecha encarnada en el macrismo. Otros porque están animados por el odio que se ha ido sembrando en estos años hacia el gobierno nacional y particularmente hacia la presidenta CFK, por el gorilismo que persiste en un segmento significativo de la sociedad y por la aspiración de sectores medios que ven como espejo deseable de su desarrollo futuro a los sectores más adinerados, es decir la aspiración de salir de la clase media para ingresar en la clase de privilegio, en los sectores de mayores recursos. Bueno, esa es una combinación que finalmente se traduce en la masa de votantes que seduce el macrismo. Ahora, mirando para adelante, algunas encuestas confiables dicen que como segunda intención de voto del electorado porteño hoy está el FPV y suponemos que es porque a lo largo de los casi 12 o 13 años que se van a cumplir desde la gestión del recordado presidente Néstor Kirchner que comenzó el 25 de mayo de 2003 hasta el presente, no caben dudas que ha mejorado sustancialmente la calidad de vida de millones de argentinos. La inclusión social, el acceso a nuevos derechos, en aquellos que conservan el pensamiento crítico, la sensibilidad social indudablemente que debería gravitar al momento de definir si van a acompañar la continuidad, con matices fuera quien fuera finalmente el candidato del FPV y sus aliados, entre los que formamos parte. Y más que aliados somos parte del kirchnerismo, como dijo Carlos Heller en el acto en Atlanta, nosotros no somos aliados, somos parte integrante, somos otra puerta de entrada a este proyecto nacional y popular y consideramos que hay un sector de la sociedad que está dispuesto a acompañar nuevamente este proyecto. La ciudad de Buenos Aires sabemos que tiene un electorado complejo, cambia de opinión según las circunstancias y según sean elecciones de medio término o presidenciales. Acá se juega mucho, porque un retroceso sería muy grave, implicaría la pérdida de muchos de los derechos adquiridos, de los logros que se obtuvieron en materia de mejoramiento de la calidad de vida y de trabajo y evidentemente hay toda una ofensiva que excede incluso a la Argentina.
¿Hay una articulación internacional de las derechas?
Yo creo que hay una verdadera Internacional de derecha que está liderada con toda certeza por mecanismos que tienen su epicentro en los EEUU, que durante un tiempo pareció estar adormecido luego del impacto del no al ALCA en Mar del Plata, en el año 2005, cuando quedó sepultado ese proyecto imperial de George W. Bush y anteriormente de Clinton. Pero el imperio nunca duerme y las circunstancias que estamos viviendo en la región, donde aparecen intentos desestabilizadores a la presidenta de Brasil, ni que hablar en la República Argentina, Venezuela y Chile, hablan de una acción articulada para generar descontento, malestar y en esta época, como ya no es viable la acción de los tanques desplegados en la calle para derrocar a los gobiernos constitucionales, quienes juegan ese papel nefasto son sobre todo los medios como expresión, como gran fuerza de infantería representante de los grandes grupos económicos que a lo largo de estos años ha visto perder privilegios.
¿Qué es entonces lo que se juega en la próxima elección?
Acá hay una disputa entre los que quieren recuperar privilegios y mantener sus posiciones de poder dominante y quienes, como nosotros, aspiramos a una distribución de la riqueza con equidad, a más y mejores derechos y todas las cuestiones que aún dentro de este proyecto nacional y popular todavía no se han concretado. Para dar un ejemplo concreto, una nueva Ley de Servicios Financieros que ponga a tono el sistema financiero con la necesidad de estimular la producción, la construcción de viviendas, las economías regionales, el acceso de todos a los diferentes servicios que debería prestar adecuadamente el sistema financiero argentino.
Hubo avances, como la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central, que con ser necesaria e importante, para nuestro modo de ver es todavía insuficiente en relación con todo lo que falta.
Hay un sistema financiero que gana fortunas, pero esas fortunas no se traducen en créditos accesibles para la producción en términos de tasas de interés, de plazos de amortización que no se consuman la rentabilidad de las Pymes sino que por el contrario se asocien a las Pymes, que son las principales generadoras de empleo.
¿Cómo puede impactar en los porteños el tremendo endeudamiento externo que deja Macri?
El gobierno de la ciudad se ha endeudado y en casi 2 mil millones de dólares, de los cuales hay un vencimiento este año de 540 millones de dólares que de algún modo van a impactar también en el bolsillo de los porteños, ya sea por aumento de algunas tasas o algunos tributos o también por derivar recursos que irían a otras asignaciones para el pago de obligaciones en moneda dura. Esto es una suma algebraica, lo que no se aplica en un lugar va a otro destino, y el endeudamiento no se ha traducido en inversiones de mejoras de infraestructura, de rubros vitales para el buen vivir de los porteños sino que ha sido fundamentalmente con un criterio especulativo y particularmente en un año electoral como éste, para hacer caja que permita financiar la campaña electoral del oficialismo de CABA. Entonces es una característica de las políticas neoliberales propender al endeudamiento porque es una forma de someter las políticas públicas, lo que indudablemente nos preocupa y lo venimos señalando sistemáticamente a lo largo de estos años de nuestra labor legislativa.
Por último, Edgardo, ¿cuál es el balance personal de tu trabajo legislativo?
Creo que he trabajado responsable y seriamente, hemos presentado muchos proyectos entre los que podría destacar el haber logrado la exención de Ingresos Brutos para las cooperativas de trabajo y de vivienda, algo que logramos en el debate sobre la reforma del código fiscal de la ciudad en 2013. Yo había presentado un proyecto con el acompañamiento de la Confederación Cooperativa de la República Argentina (Cooperar) y Coninagro, que representa al sector agropecuario, y en ese momento planteábamos la exención de Ingresos Brutos para todas las cooperativas partiendo del concepto que el acto cooperativo no es un acto de comercio sino que los asociados se organizan para brindarse a sí mismos servicios en un hecho solidario. Logramos no todo pero sí una parte que alivia significativamente la economía de estas cooperativas más débiles que son las cooperativas de trabajo y de vivienda. Esto tiene impacto sobre más de mil cooperativas de trabajo y más de un centenar de cooperativas de vivienda, con lo cual el alivio cae sobre decenas de miles de hogares y eso me hace sentir muy contento.
Por otro lado, el año pasado logramos, en coautoría con otros colegas como Susana Rinaldi, Pablo Ferreyra y Lorena Pokoik, una ley para regular y darle un marco de previsibilidad a los centros culturales que fueron muy castigados, como se sabe, por la Agencia Gubernamental de Control que hizo cierres sistemáticos durante el 2014 e incluso durante el comienzo del verano 2015. Este año está pendiente el tratamiento de una segunda parte de la ley, seguramente lo haremos en marzo si hay voluntad política del bloque oficialista, pero creemos que ha sido un logro porque cubre un vacío legal que no le daba garantías de funcionamiento a los centros culturales que han sido expresión autogestionada de la sociedad sobre todo a partir de la crisis de 2001.
Hemos presentado innumerables proyectos de declaración, de beneplácito, de reconocimiento a personalidades que se destacan en distintos rubros como por ejemplo personalidad destacada de las ciencias políticas a Atilio Borón, de las letras y el periodismo a Ana María Ramb entre otros. Hemos hecho en el marco del stand en la Feria del Libro de la Legislatura porteña algunos actos destinados a difundir, por ejemplo, los logros de CUBA en materia de alfabetización, el año pasado hicimos un panel con el entonces embajador Jorge Lamadrid Mascaró sobre el programa Yo sí puedo, con algunos de los protagonistas, de los docentes que realizan una labor tan importante y también organizamos con una colega de otro bloque, la diputada González Gass, una charla sobre políticas públicas para el buen vivir, también con el embajador de Cuba porque hemos logrado la constitución del grupo de legisladores de Amistad con Cuba, del cual tengo el honor de ser el presidente, partiendo de una resolución de la propia Legislatura del año 2007, que la pusimos en práctica en el 2012 y creamos también el capítulo porteño de la Red de parlamentarios cooperativistas, esto se formalizó durante el 2013 a partir de una iniciativa que comenzó con la Red nacional de parlamentarios cooperativistas, en la cual participa Carlos Heller. También se constituyó un capítulo semejante en la Legislatura de Santa Fe y lo hemos conformado en la Legislatura porteña con la intención que sea una caja de resonancia de las reivindicaciones, los proyectos y las propuestas del sector de la economía solidaria.
Por supuesto sería deseable, no solo a nivel personal sino principalmente para el PSol que pudiéramos tener continuidad en la Legislatura, porque la representación parlamentaria ayuda al fortalecimiento y crecimiento de la fuerza política, a la autoestima de la militancia y -obviamente- me parece muy importante que podamos darle continuidad a todos estos proyectos. Además, porque tener una banca en un ámbito legislativo es como contar con un altavoz para que nuestras propuestas y nuestras reflexiones propositivas o críticas tengan mayor amplificación y lleguen mejor a la sociedad.
Texto: Santiago Mouradian
Fotos: Nicolás Finoli