En medio de una suba de contagios de coronavirus muy preocupante, luego de un 2020 en el cual la gestión porteña no ha realizado políticas públicas a tono con las medidas aplicadas por el Gobierno Nacional para aliviar la situación económica, proteger el trabajo y la producción, y en el marco de nuevas restricciones que se hacen inevitables por el rebrote del virus, el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta dispuso un tarifazo. Los aumentos, por encima de la estimación inflacionaria, se aplicaron en subtes (43% en dos etapas), taxis (44%), multas (82,5%), parquímetros (100% con 86 mil nuevos espacios de estacionamiento pago en casi todas las comunas), VTV (45%), peajes (55%), ABL (por mes según el IPC) y con un nuevo impuesto a las compras con tarjetas de créditos de 1,2%, en una clara medida recaudatoria que afecta aún más el bolsillo de los sectores medios y bajos porteños, al mismo tiempo que presiona la suba inflacionaria y no mejorará en absoluto la vida de los vecinos y las vecinas.
Desde el Partido Solidario de la CABA denunciamos este nuevo e injustificable tarifazo ante la tergiversación y el ocultamiento por parte de los principales medios hegemónicos que, a cambio de un enorme ingreso publicitario, construyen un verdadero cerco de protección mediática. Exigimos que el jefe de Gobierno dé marcha atrás con estos ajustes y cambie de actitud, disponga medidas para aliviar los efectos de la pandemia y trabaje mancomunadamente con el Gobierno Nacional para reducir los contagios y evitar una segunda ola que le cueste la vida a miles de argentinos y una reducción de la actividad económica.
Al mismo tiempo, advertimos nuevamente esta actitud de insensibilidad por parte la gestión de Juntos por el Cambio, en un contexto social dramático por los efectos tanto de la pandemia económica generada durante los cuatro años de administración macrista como por la pandemia sanitaria mundial que no sólo trae consigo muertes y contagios sino una profundización de la problemática económica con fuerte impacto en el trabajo y el empleo. La situación sanitaria indica que el aumento en la curva de los contagios es alto, el panorama es tan grave que el hasta el propio jefe de Gobierno se contagió de coronavirus.
Esta actitud con la población de nuestra querida Ciudad no es nueva y sino que es propia de una gestión que durante el 2020 no ha realizado casi ningún tipo de asistencia para morigerar los efectos del coronavirus en los comercios, pymes, trabajadores y cooperativas que producen y tributan en la CABA, en contraste con las medidas realizadas desde el Gobierno Nacional que ayudaron a contrarrestar el aumento de la pobreza, la indigencia y el desempleo. Tal actitud también es coherente con la política de privatización de la tierra pública que tiene como su máximo exponente el proyecto de rezonificación de los predios de Costa Salguero y Punta Carrasco donde la gestión de Horacio Rodríguez Larreta pretende desarrollar un negocio inmobiliario de torres premium que impedirá para siempre el acceso y el disfrute del río. Por otra parte, los recortes en el presupuesto porteño, especialmente en las áreas de Educación se corresponden con la sistemática descalificación hacia los y las docentes por parte de la ministra de Educación, Soledad Acuña.
De esta manera, el Gobierno de la Ciudad, fiel a su estilo, arranca el 2021 con más ajustes al bolsillo de los y las porteñas a quienes busca engañar con la excusa de que tales aumentos y reducciones presupuestarias son a causa de la corrección del exceso de fondos nacionales transferidos por decreto durante la presidencia de Macri correspondientes al traspaso de funciones de la Policía Federal a la Policía de la Ciudad. Una excusa muy endeble ya que dichos fondos triplicaban lo necesario para cubrir el presupuesto en seguridad, lo cual fue incluso reconocido por Larreta y por su vicejefe de Gobierno, Diego Santilli, durante el verano del 2020. Antes que excusarse y victimizarse, los funcionarios tendrían que indicar el destino de tal exceso de fondos dado que, en la ciudad no se construyó ni un solo hospital y casi ninguna escuela.
La CABA tiene el presupuesto más alto del país y es uno de los más grandes de Latinoamérica, sin embargo, los porteños y las porteñas somos el último orejón del tarro para una gestión que hace años se alejó de la ciudadanía y prioriza los negocios de sus empresas amigas. Necesitamos políticas públicas activas para aliviar la situación económica y social en el marco del nuevo rebrote. Que mejore la calidad de vida de todos y de todas, que resuelva los problemas habitacionales, de salud, de educación y de infraestructura de una ciudad que hace rato tiene un déficit con sus habitantes y que, a causa de este nuevo tarifazo tendrá que pagar de más en este 2021 sin recibir a cambio la contraprestación adecuada. Por último, hacemos un llamado a la población a reforzar los cuidados, mantener la distancia, lavarse las manos, cumplir los protocolos, hisoparse en caso de presentar síntomas, reducir los encuentros sociales, usar el barbijo y ser más solidarixs entre todos y todas.
Partido Solidario de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires – Frente de Todos.